Celeste Jiménez. París
Actualizado Jueves, 11 mayo 2023 – 11:20
Cómo cambiar un término puede, también, cambiar la imagen
Hace apenas unos años, comprar ropa de segunda mano no estaba bien visto. Sin embargo, quienes invertían en este sector decidieron denominar a su producto <vintage>, aparecieron tiendas especializadas (físicas o digitales, como Vinted) y el resultado fue el siguiente: éxito. A ello se le suma el toque de conciencia, pues ciertamente es una moda respetuosa con el medio ambiente. Según la Agencia Francesa de Medio Ambiente y Gestión de la Energía (Ademe), de 9,5 kilos de ropa al año por habitante, sólo se recogen y reciclan 3,6 kilos. Este consumo excesivo es problemático, sobre todo desde el punto de vista ecológico: por ejemplo, la confección de una sola camiseta requiere el uso de 70 litros de agua. Además, en estas tiendas se puede encontrar verdaderas piezas de coleccionista.
Este sector, en cifras
Entre los imperativos ecológicos y la necesidad de ahorrar por la inflación, cada vez más personas recurren al mercado de segunda mano. Aunque por desgracia el salvamento sigue siendo una necesidad para demasiada gente, al mismo tiempo se está haciendo cada vez más popular entre las clases medias. El mercado de segunda mano se estima actualmente en 7.000 millones de euros en Francia y 86.000 millones en Europa, según un estudio de Fintech Tripartie. Se ha demostrado que 7 de cada 10 personas compran ropa de segunda mano. Diferentes encuestan reflejan que el 81% opina que esta ropa permite ahorrar entre un 25 y un 50%, y el 47% afirma haber recurrido más al mercado de segunda mano desde que empezó la crisis sanitaria de la COVID-19.
La influencia de revistas e instagrammers
Como este éxito es ya una realidad, las revistas están llenas de consejos sobre cómo encontrar y vender las mejores piezas o cómo combinarlas. «Instagram también se apunta al carro con cuentas que muestran fotos de moda de los años sesenta u ochenta. Le Printemps dio cabida a la marca Tilt Vintage a través de corners en los departamentos de moda femenina y masculina de su tienda del Boulevard Haussmann de París.» Le cours du « vintage » en plein essor sur le marché de l’occasion (2019) Les Echos.com
Diferencias entre España y Francia
En España, la moda de segunda mano ha sido tradicionalmente mal vista en comparación con países como Francia. Sin embargo, esto se debe en gran parte a la falta de una cultura arraigada de tiendas de segunda mano y a la existencia de un estigma social asociado con la ropa usada. En Francia, por otro lado, la moda de segunda mano es vista como una forma de arte y autoexpresión. Los franceses consideran la ropa de segunda mano como piezas únicas y de calidad, que son más respetuosas con el medio ambiente y más económicas que la ropa nueva. Además, el estilo parisino ha sido siempre sinónimo de elegancia y sofisticación, y el vestuario de segunda mano permite a las personas obtener prendas de calidad a precios razonables. La cultura y la historia de cada país juegan un papel importante en cómo se percibe la moda de segunda mano, pero existe una realidad y es que esta forma de comprar (también música, libros y otros productos) ha venido para quedarse.
Invertir en España y en este mercado es todo un acierto pero, para ello, es necesario conocer muy bien el lenguaje. Si necesitas aprender vocabulario sobre español de los negocios y turismo, la certificación de español oficial ELYTE te ofrece una solución rápida y online de la mano de la Cámara Oficial de Comercio de España en Francia. Infórmate pulsando en este enlace.